Reflexión del comunicador Axel Mustela para unos tiempos en los que la represión, el engaño mediático y las campañas de terror dirigidas a la población se justifican “en nombre de la ciencia”. Y esto es así hasta el punto que, a quienes nos apartamos una coma siquiera del discurso hegemónico se nos tacha de conspiranoicas, terraplanistas o magufos.
Pero examinemos detenidamente cuáles son esas sacrosantas evidencias científicas con las que se llenan la boca las corovirunoicas y los fanáticos telecreyentes.
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